Carta del comandante Merrill

El credo no es ninguna sugerencia. Es un código de comportamiento que todo hombre de toda fe debe conocer y respetar. Espero que lo aprendas y creas en él. Y, si no, puedes empaquetar tu acero y volver a vender tu brazo en el mercado local. Cualquier compañía puede enseñarte a matar… sin piedad ni excepción. En la Rosa de hierro nos regimos por un estándar diferente. Un estándar mejor. Uno de una adherencia firme pero justa a las leyes que hemos jurado mantener y, sobre todo, al credo. Por eso pagan nuestros clientes. Si te pido que te recite el credo en cualquier momento, lo haces. No me importa si tienes un cuchillo al cuello o si hay enemigos en nuestras puertas; si te equivocas o titubeas, estarás FUERA de la compañía. ¿Queda claro? -Comandante Elaina Merrill