El crisol escarlata

Page #4
En Forellac

Hace demasiado tiempo que no me siento con fuerzas para escribir. La fiebre me empezó a bajar hace cuatro días. Acabo de salir de casa por primera vez en dos semanas… y todo ha cambiado. Solo un puñado hemos sobrevivido a esta enfermedad… Mi padre y mi madre no están. Mis hermanos no están. Nuestros vecinos tampoco. Intenté ir hacia las minas hoy, pero me detuve en seco cuando vi cómo estaba todo. Ya no es un pueblo bien administrado con un propósito… Ahora, es un lugar funesto contaminado de corrupción. Intenté buscar a mi capataz, a mi amor, pero parece que él también ha sucumbido. No me vieron y me fui rápidamente. Hemos recolectado lo poco que podemos llevar y nos dirigiremos hacia el asentamiento del noroeste en busca de cobijo.